EL JEFE DE GOBIERNO CAPITALINO ABANDONÓ A SU SUERTE A LOS PELEADORES PROFESIONALES DEL DISTRITO FEDERAL
Por JUAN GUTIÉRREZ JR.
¿Miguel Ángel Mancera se habrá enterado de que ya está gobernando?
Y es que lo que dijo hace unos días, Edgar Puerta, campeón plata del Consejo Mundial de Boxeo, que, “A LOS BOXEADORES NOS GUSTA PELEAR Y LAS CUENTAS CLARAS, NI PAGOS EN ABONOS Y MUCHO MENOS QUE NOS QUEDEN A DEBER… YO VIVO DEL BOX, SOY UN PROFESIONAL Y ESTOY PUESTO PARA PELEAR CUANDO USTED QUIERA”, refiriéndose a como lo trata un promotor capitalino es para ya se ponga fin a tanto abuso del poder. Alguien tiene que ir a mover al Jefe de Gobierno para sacudirlo y decirle que está en sus manos poner orden en el boxeo profesional capitalino.
Es increíble como en materia boxística se pueda permitir de todo en la capital de México, ante la amnesia de organismos internacionales de boxeo, de la Comisión de Box del Distrito Federal, Instituto del Deportes del Distrito Federal y quien resulte responsable.
Lo que dijo Edgar Puerta es una muestra de cómo un empresario, con la mano en la cintura, puede pagar como le plazca y todavía quitarle al boxeador un porcentaje, sin que nadie salga a poner el alto a este tipo de arbitrariedades.
En el Distrito Federal puede llegar cualquier promotor a hacer funciones de boxeo y los peleadores no tienen garantía alguna que les paguen bajando del cuadrilátero, como marca el reglamento. A muchos de ellos los traen a vuelta y vuelta, como si pidieran limosna, cuando ellos ya cumplieron arriesgando la vida arriba del ring.
Pero lo más grave es que otros empresarios ni en abonos pagan y pruebas hay muchas y, eso, señor Mancera, usted lo sabes (¿se acuerda de la función del Bicentenario?), pero parece finge demencia. Los organismos en lugar de intervenir y hacer su trabajo, no tienen la menor intención de abogar por los peleadores, ellos cobran por sancionar las peleas y que los demás les tiene sin cuidado, permitiendo todo tipo de injusticia.
Señor Mancera, usted ha dado a entender que quiere ser Presidente de México, pero si no puede poner en orden el boxeo capitalino, menos lo podrá hacer con un país. Da mucha rabia que ni los políticos (Cámara de Diputados y Senadores), ni los dirigentes de Derechos Humanos tomen cartas en el asunto para que, cuando menos, los boxeadores cobren su salario, aunque habría otros asuntos de los que son víctimas.
En la historia del boxeo del Distrito Federal nunca se habían visto cosas tan aberrantes como lo que ha sucedido en los últimos diez años. Ahora los boxeadores, además de pelear, tienen que ir a Basílica de Guadalupe y pedir, no sólo ganar sus peleas respectivas, sino que se encuentren a un promotor honrado que les pague, que no los engañe. ¡Es el colmo!
Don Miguel Ángel usted ha dicho que el boxeo es uno de sus deportes favoritos, incluso, ha puesto los guantes y ha convivido con muchos boxeadores, pero por lo que se ve, eso es sólo estuvo en discurso, ya que en la realidad ha dejado morir solos a los pugilistas, quienes con frecuencias son víctimas de infamias, sin que tengan un mínimo apoyo del gobierno, antes Marcelo Ebrard y, ahora, usted.
No es grato hablar de estos temas, pues siempre hay gente que se incómoda, para luego decir que son los enemigos políticos, pero no, esto se trata de las más elemental justicia para los jóvenes que son, muchas veces amenazados, con sacarlos de las clasificaciones o boicotear sus carreras, si se atreven a decir algo. Por ello se debe reconocer el valor de Edgar Puerta que puso el dedo en la llaga.