“Moi” Fuentes da méritos a su equipo de trabajo
Moisés Fuentes regresó a ser ese boxeador contundente. Después de su resonante triunfo por nocaut efectivo en el primer round sobre Ulises Lara, para así cobrar revancha de su anterior derrota, el ex doble campeón mundial con su característica humildad, dio crédito a su equipo de trabajo, ya que gracias a ellos logró levantarse con la mano en todo lo alto.
Lo anterior lo dijo el mismo boxeador en los vestidores del Domo del Sindicato de los Trabajadores del IMSS, terminada su pelea, donde era felicitado por su padre, su guapa esposa Janine Martínez, sus pequeños hijos Moisés junior y Santiago, así como amigos y familiares.
“Lo primero que tuve que hacer era cambiar de equipo”, acotó de forma tajante.
Y siguió: “Tener un equipo con hambre, con sed de triunfo y esa fue la clave y ahí el resultado, nocaut efectivo en el primer round ante un boxeador experimentado y hábil como el ´Ratón´ Lara, a quien estimo porque es un gran amigo”, admitió.
Alejandro “Pollo” Galindo y Ricardo Gómez, sus nuevos entrenadores en la sala de prácticas y con experiencia, pusieron a tono y exigieron al máximo a Fuentes Rubio.
“Me trabajaron con hambre –insistió- y tenemos muchas ganas y creo que tenemos todavía para ser campeones del mundo”.
Moisés fue claro cuando mencionó que una de las claves de su preparación con su nuevo equipo laboral fue “trabajar y trabajar. Levantarme temprano para correr. Ir por mí y que siempre me dijeran ´vámonos a correr´. Ellos no son mis papás, pero si me ven con las ganas y proyección de ir por un título del mundo”.
El doble monarca mundial en las divisiones mínimo y minimosca de la WBO, habló de su pelea ante Lara y reconoció que pensaba tener una guerra como en su primera cita sobre el encordado.
“Miren a Moi Fuentes preparado, fuerte y entrenado. Ese soy yo. El de verdad y a conseguir un título mundial en peso mosca, primero Dios que me dé fuerza y salud”.
Para rematar, agradeció el apoyo de todos sus seres queridos como su padre, su esposa e hijos, así como toda su familia y “gracias principalmente a Dios y también al señor Víctor Flores del Sindicato de los Ferrocarrileros de la República Mexicana, por su gran apoyo”.
