‘Bam’ Rodríguez valora las exigencias de su deporte y se nota.

Por Lance Pugmire
MORENO VALLEY, California – El campeón de peso supermosca Jesse “Bam” Rodríguez tiene un enfoque minimalista del boxeo.
Tal vez por eso, cuando se le preguntó a Rodríguez qué era lo que más le preocupaba de Fernando “Puma” Martínez, su compañero campeón de las 115 libras del sábado, respondió: “Nada”.
Con una atención al detalle que recuerda a la vieja escuela y una renuencia a presumir a medida que su popularidad asciende a la cima de su deporte, Rodríguez, de 25 años y originario de San Antonio, con un récord de 22-0 (15 KOs), busca agregar un tercer cinturón de 115 libras a su colección en la cartelera de la Temporada de Riad en DAZN.
DETALLES
El excampeón de peso mosca Rodríguez ha derrotado a casi todos los campeones de peso supermosca que lo precedieron (Srisaket Sor Rungvisai, Carlos Cuadras y Juan Francisco Estrada) y tiene la intención de subir de peso para enfrentarse a rivales como el reciente campeón invicto de peso gallo Junto Nakatani y el campeón invicto e indiscutible de peso pluma junior Naoya Inoue.
“Para cuando termine, será campeón en cuatro divisiones”, dijo Eduardo García, patriarca de la poderosa familia boxística García, que cuenta entre sus hijos al entrenador del año Robert García y al campeón en cuatro divisiones Mikey García.
Tras la marcha de Rodríguez a Arabia Saudí, BoxingScene visitó el miércoles la Academia de Boxeo Robert García para hablar de la admiración que los boxeadores del centro sienten por Rodríguez.
Carlos Balderas, contendiente de 140 libras de ProBox, describe a Rodríguez como “de otra pasta”.
“Está súper motivado”, dijo Balderas. “Cada vez que llega, no se entretiene vendándose las manos. No se entretiene charlando con todo el mundo. Se pone a trabajar enseguida. Se le ve bien, y lo verán el sábado”.
“Hay boxeadores conocidos por ser arrogantes y directos. Él casi ni habla aquí en el gimnasio. Hay que sacarle la conversación. Su talento habla por sí solo. Ver lo joven que es, su excelente juego de pies… cuando los demás se van, lo veo haciendo flexiones y abdominales. Es esa mentalidad la que lo distingue de otros boxeadores”.
Cuando se le preguntó si tenía algún mensaje para Rodríguez, Balderas dijo que estaba tan seguro de que Rodríguez ganaría: “Voy a apostar la casa, el coche y el perro”.
El campeón de peso ligero de la IBF, Raymond Muratalla, dijo que su profundo respeto por Rodríguez se basa en su ética de trabajo.
“Lo que lo distingue es su constancia; lo desea con todas sus fuerzas”, dijo Muratalla, igualmente decidido. “No veo a nadie que pueda vencerlo ahora mismo. Así somos: trabajamos en silencio y les demostramos de qué somos capaces”.
El entrenador García está sentado en un sillón reclinable frente a los tres rings de sparring de RGBA para supervisar a los luchadores y brindar asesoramiento cuando sea necesario.
Dijo que Rodríguez es uno de los boxeadores “más inteligentes, disciplinados y mejores” que jamás haya visto.
“Es muy obediente y le gusta seguir instrucciones”, dijo García. “Va a ganar el sábado. Lo veo ganando por nocaut. Gira cuando se mueve y tiene unos uppercuts buenísimos. Pega muy fuerte. Confiamos en ‘Bam’”.
Observar a Rodríguez en su entrenamiento es recordar a aquellos grandes boxeadores que lo precedieron y que se esforzaron al máximo en el gimnasio: Floyd Mayweather, Manny Pacquiao, Saúl Álvarez, Gennady Golovkin. Ese esfuerzo extra se traduce en actuaciones deslumbrantes, donde la clase del boxeador preparado los lleva a la victoria.
Leo Rubalcava, un boxeador de 140 libras que está subiendo de categoría, dijo que se ha detenido para estudiar los hábitos de Rodríguez.
“Su esfuerzo, dedicación y concentración… le han permitido desarrollar habilidades y ángulos que nadie más posee”, dijo Rubalcava. “Lo veo practicar boxeo de sombra durante mucho tiempo. Siempre encuentra un ritmo único”.
Mientras Inoue y Nakatani se preparan para un probable enfrentamiento en 2026, Rodríguez buscará al campeón supermosca de la FIB, el mexicano Willibaldo García, tras derrotar a Martínez, de 34 años, para obtener un campeonato indiscutible.














