Rompe en llanto al revelar que se siente «vacío» sin boxear y tiene miedo del hombre que fue.
A 15 años de abandonar el cuadrilátero, la leyenda del boxeo todavía está luchando para tener una vida normal fuera del deporte al que dedicó toda su vida.
Jason Lee/Reuters
Apodado alguna vez como el «hombre más malo del planeta», Mike Tyson es ampliamente considerado como uno de los mejores boxeadores de los pesos pesados de la historia. A principios de la década de 1990 fue uno de los deportistas más famosos, si no el más célebre del mundo. Ahora, a los 53 años, su vida es diferente
El indiscutible excampeón mundial colgó sus guantes en 2005 después de una carrera de 20 años, en la que ganó múltiples títulos y 50 de sus 58 peleas. En los últimos años, Tyson ha realizado algunos trabajos de cine y televisión, además de presentar un podcast propio, ‘Hotboxin with Mike Tyson’. Su último invitado fue otra leyenda del boxeo: Sugar Ray Leonard.
Durante su conversación con Leonard, Tyson se echó a llorar al revelar que concentró tanta energía en ser el mejor en el ring que retirarse del boxeo lo ha dejado «vacío».
«Yo era un aniquilador».
Aparentemente, 15 años después, Tyson todavía está luchando para tener una vida normal fuera del deporte al que dedicó toda su vida. La leyenda del boxeo admite sentirse un «nada» porque ya no es el luchador más temido del mundo.
«Soy un maldito estudiante de guerra», dijo Tyson al explicar que estudió a todos los guerreros más famosos de la historia. «Sé el arte de pelear, sé el arte de la guerra, eso es todo lo que estudié».
Por eso, dice, todos lo «temen tanto» y por eso lo «temían cuando estaba en el ring». «Yo era un aniquilador. Fue solo para eso que nací», agregó el excampeón.
«Ahora esos días se han ido. Estoy vacío, no soy nada. Estoy trabajando en el arte de la humildad. Esa es la razón por la que estoy llorando, porque ya no soy esa persona y lo extraño», aseveró Mike Tyson.
Al explicar por qué la conversación lo había dejado llorando, agregó: «Porque a veces me siento como un cobarde, porque no quiero que esa persona salga. Porque si sale, el infierno viene con él».
«Y no es divertido en absoluto. Parece como si yo fuera un tipo duro, [pero] odio a ese tipo. Le tengo miedo», concluyó Tyson.