
Por JUAN GUTIÉRREZ JR.
El Consejo Mundial de Boxeo no puede pasar por alto la gran injusticia que se fraguó el sábado en el Fórum de Inglewood, California, al despojar al mexicano, Carlos Cuadras, de un claro triunfo sobre el nicaragüense, Román “Chocolatito” González, quien sin merecer la victoria, los jueces le dieron su regalo de Navidad por adelantado (las imágenes no mienten).
Otra vez los intereses económicos están por encima de la justicia deportiva. Todo mundo sabe que para un empresario como Akihiko Honda es más provechoso “mover” a un peleador que gana cuatro títulos en diferentes divisiones que uno que no lo es, aunque ambos peleadores están bajo su dirección.
Pero las imágenes son inobjetables, ver a un “Chocolatito” González muy lastimado del rostro, como nunca nadie lo había maltratado a lo largo de su carrera, mientras cuadras luce totalmente limpio.
Cierto que la pelea fue de alarido se respiraba en el ambiente el nocaut, pero Cuadras hizo una pelea inteligente y quien vea la repetición de la pelea, se darán cuenta que en efecto, Román tiraba muchos golpes, pero también muchos quedaron en el aire.
El Consejo Mundial de Boxeo tendrá que revisar el video y darse cuenta que Román recibió demasiado castigo y que en realidad nunca tuvo en malas condiciones al “Príncipe” Cuadras y que el púgil nicaragüense, terminó masacrado del rostro.
Sabemos que el Consejo Mundial de Boxeo tiene muchos compromisos con todo mundo y que la voz de Honda pesa mucho, pues aún no se puede entender cómo robaron en despoblado a Pedro Guevara a finales del año pasado en Japón, ante Yu Kimura, y el organismo, para no causar la furia de Honda, “nadó de a muertito”. Mauricio Sulaimán le tembló la mano, se hizo el “occiso” en forma cobarde, permitió otro robo de vergüenza en el Consejo Mundial de Boxeo.
En esta ocasión no puede pasar por alto este atraco, las evidencias ahí están, son inobjetables y la revancha directa es obligada, sobre todo que si a Amir Khan ya le prometieron una pelea de título mundial, cuando viene de ser noqueado por el “Canelo” Álvarez, el sonorense Cuadras tiene el derecho al desquite, por la golpiza que le puso al “Chocolatito”.